Guía para conocer los tipos de despido laboral en México

Si tienes una empresa, probablemente sepas que una de las decisiones más difíciles de tomar es la de despedir a uno de tus empleados, no solo por haber desarrollado una relación cercana con ellos, sino por la carga administrativa que genera un despido.

Hoy en el blog de Nomitek te contaremos cuáles son los diferentes tipos de despidos en México y cómo debes gestionarlos para evitar un problema legal con el exempleado.

¿Qué es un despido laboral?

El despido consiste en la rescisión o terminación de la relación laboral, cuya decisión es tomada de forma unilateral por el patrón o la empresa de forma anticipada, es decir, antes de que finalice el contrato de trabajo.

Esta decisión es una de las menos gratas para las empresas, en particular para el departamento de RR.HH., ya que no suele darse en los mejores términos, sino todo lo contrario: lo más común es que el despido se dé entre disgustos, inconformidades y problemas legales.

Existen dos tipos de despidos, cuyas características te contaremos a continuación:

Despido justificado

De acuerdo con el Artículo 46 de la Ley Federal del Trabajo, el despido justificado se presenta cuando el empleado incurre en alguna de las causales que se señalan en el Artículo 47 de la misma ley. A grandes rasgos, esas causales son:

• Engañar al patrón con referencias o certificados falsos, así como capacidades, aptitudes o conocimientos que no tenga.
• Incurrir en injurias, amagos y otros actos de violencia contra el patrón, personal de la empresa, clientes o proveedores.
• Causar daños materiales en las instalaciones, materias primas, maquinaria y otros objetos relacionados con la empresa, ya sea con dolo o de forma negligente.
• Cometer un descuido que ponga en riesgo la seguridad del establecimiento y de las personas que se encuentren en él.
• Cometer actos inmorales como hostigamiento sexual contra cualquier persona en el lugar de trabajo.
• Revelar secretos de la empresa.
• Acumular más de tres inasistencias en un periodo de 30 días, sin causa justificada y sin permiso del patrón.
• Asistir al trabajo en estado de embriaguez o bajo el influjo de narcóticos sin prescripción.
• Desobedecer al patrón o a sus superiores sobre el trabajo que desempeña.
• Negarse a seguir las medidas preventivas para evitar accidentes o la propagación de enfermedades.
• Empleados que tengan una sentencia con pena de prisión.

En caso de que el patrón decida despedir a un empleado, debe notificarle por escrito la o las conductas que motivaron la decisión, la fecha y un resumen de los hechos más importantes. Además, debe hacer el pago correspondiente al finiquito, pago que se conforma por:

• Días trabajados y no pagados hasta la fecha de recisión del contrato
• Parte proporcional de aguinaldo, vacaciones y prima vacacional
• Prima de antigüedad
• Prestaciones vigentes incluidas en el contrato, como comisiones, bonos, utilidades, fondos de ahorro, entre otras.

Por último, es muy importante entregar personalmente el aviso al empleado al momento del despido, y comunicarlo a la Junta de Conciliación y Arbitraje competente en un plazo de cinco días hábiles. De no hacerlo, se podría considerar como una separación no justificada y, por ende, la posible nulidad del despido.

Despido injustificado

El despido injustificado es una decisión unilateral de terminar el contrato antes de tiempo sin causa que lo justifique, y sin verificar que se haya presentado una conducta inadecuada del empleado.

En este caso, el empleado puede interponer una demanda en la Junta de Conciliación y Arbitraje en un plazo de dos meses posteriores al día en que se dio el despido injustificado. Dentro de las demandas, puede solicitar la reinstalación en el puesto en que se desempeñaba, junto con los salarios caídos; o bien, puede solicitar el pago de una indemnización, la cual equivale a 3 meses del salario percibido, la prima de antigüedad, el proporcional a vacaciones, prima vacacional y aguinaldo, además del pago del finiquito.

Recomendaciones para un despido “amigable”

• Mantén visible el reglamento de la empresa y las causales de despido para que le queden claros a tus colaboradores.
• Comunica tu decisión al encargado de recursos humanos para que se encargue de los procesos legales y te indique cómo debes proceder.
• Redacta la carta de despido, pero también explica al empleado las razones de su despido. Usa un tono de voz tranquilo y amable mientras expones las causales.
• Antes de entregar la carta al empleado, asegúrate de que esté bien redactada y no podrá ser impugnada por un abogado en materia laboral.
• Escucha los argumentos del empleado, pero mantente firme en tu decisión
• Indícale los pasos a seguir: recoger sus pertenencias, cobrar su último recibo de nómina, el último día de trabajo y proporciónale los documentos que requiera.

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