En nuestros días, la responsabilidad social en las empresas es un término que se asocia con frecuencia a nociones vinculadas con la sustentabilidad, el progreso en conformidad con la ética, la filantropía, la ecología, la beneficencia, las acciones comprometidas con la comunidad y la sociedad en general, etcétera. Más, es evidente que tal término no se limita a la realización de acciones favorables para la naturaleza y los hombres que requieren de apoyo tanto moral como económico. Si bien resulta verdadero que el distintivo ESR, es decir aquel expresa que una empresa es socialmente responsable, es valorado con más fuerza en el ámbito empresarial, también es cierto que aún muchas personas desconocen cuál es su sentido, a qué hace referencia, y cuáles son sus implicaciones. Tal situación se debe a que incide en diferentes ámbitos: desde los económicos, los ecológicos, los sociales, hasta los de administración de recursos y los principios éticos en la producción y prestación de bienes y servicios.
Proponer una definición de la responsabilidad social empresarial no ha resultado una labor sencilla debido a que los estudiosos en el tema la han definido de formas muy diversas. Sin embargo, de manera general se trata de acciones que se efectúan voluntariamente, es decir, sin la intromisión de obligaciones, asimismo, enfatiza en la ética de dichas acciones, las operaciones y decisiones de las empresas. También fomenta el respeto hacia la dignidad humana así como el desarrollo comunitario. No podemos omitir la preservación y el cuidado del planeta, el cual ha mostrado signos negativos a causa de la actividad humana irresponsable. Todo lo enunciado tiene por fin contribuir al desarrollo y bienestar común, y evitar las prácticas negligentes empresariales que tanto daño ha causado y pueden aún causar.
Tal posicionamiento por parte de los negocios ha conllevado transformaciones no sólo operacionales sino también relacionadas con la filosofía empresarial. En el pasado se consideraban casi con exclusividad los bienes económicos, mas en nuestros días se incluyen medios responsables que abarquen las diversas dimensiones en la que se desenvuelven los empresarios, de modo que los fines no entren en conflicto con el bien común, la ley, y los demás elementos y entornos involucrados. Para ello, entre los fines se ha incluido el equilibrio conocido como triple cuenta de resultados, el cual implica responsabilidad en lo relacionado a la sociedad y la naturaleza. En tal sentido, para que muestre óptimos resultados así como impactos positivos en la comunidad, es menester que los directivos de las empresas tengan conocimiento de los principios de la responsabilidad social empresarial con tal de que puedan efectuar acciones que promuevan una cultura más consciente, ética, sustentable en toda la población.
La responsabilidad social puede considerarse también como una postura ética por parte de las empresas con respecto a sus actividades y su sustentabilidad. Debe de considerarse asimismo como una necesidad más que una tendencia en el ámbito de los negocios, ya que no se trata de una simple moda, sino de establecer principio sólidos dentro de las empresas que incidan tanto en su interior como su exterior. Algunos pensarán que se trata de algo complicado o innecesario y por ello lo pasan por alto, sin embargo, conlleva ventajas considerables que seguro los harán cambiar de parecer. Mencionemos algunos de ellas:
Aunque la responsabilidad social implica gastos extras para las empresas, tales gastos no deben mirarse como dinero perdido sino como una inversión más, debido a que las estrategias de las ESR tienen una directa e indirecta rentabilidad así como un crecimiento económico. La sustentabilidad de la responsabilidad social consiste en una de las mejores estrategias para hacerle frente a las acciones negligentes, el agravio hacia terceros, y para participar de forma favorable en el entorno. Entre tales estrategias pueden señalare el reconocimiento de la dignidad humana, el apoyo al personal para que este se desarrolle tanto individualmente como en sociedad, y el aprovechamiento y uso correcto de los recursos obtenidos de la naturaleza.
Con lo dicho se entenderá por qué los negocios mexicanos deben adoptar la responsabilidad social empresarial, no sólo para mostrar a la población una buena imagen de sí, sino también para mostrarle a todo el mundo que en México, las empresas actúan en conformidad con la ley, de forma ética y respetuosa hacia los demás seres y entornos. Si necesitan más información al respecto, pueden contactarnos, en Nomitek estamos para servirles. ¡Hasta la próxima entrada!