Si trabajas en el área de recursos humanos, probablemente hayas notado un fenómeno común en los últimos años. Llega un candidato a solicitar un trabajo, lo entrevistas, lo seleccionas por tener un excelente perfil, lo contactas para decirle cuándo comenzar… y de pronto, no puedes contactarlo más.
El candidato desaparece, te bloquea de Skype y se va sin darte ni las gracias, y mucho menos una explicación de su conducta.
A este fenómeno se le conoce como ghosting laboral, y hoy en el blog de Nomitek, expertos en consultoría en responsabilidad social y software de nómina te contaremos qué es, porqué se da y cómo evitarlo.
Ghosting es una palabra anglosajona que puede traducirse como “hacerse el fantasma”. Es decir, desaparecer sin dejar rastros ni explicaciones. En el contexto laboral, ghosting consiste en dejar el trabajo y los compromisos relacionados, cortando toda comunicación con RR. HH., los jefes, e incluso con los compañeros de trabajo.
Esta situación es muy frecuente entre personas de las generaciones millenial y centennial, es decir, empleados de 18 a 45 años. Si bien se presenta comúnmente en la etapa de reclutamiento y selección de personal, puede darse también en trabajadores ya contratados, quienes en el transcurso de los días o semanas abandonan su trabajo sin previa explicación.
Se estima que el 20% de los trabajadores de las generaciones millenial y centennial dejan su empleo luego de un mes, o incluso antes, si no satisface sus expectativas. El ghosting es más frecuente durante el periodo de selección y se extiende hasta los primeros seis meses de haber ingresado el empleado ya que de acuerdo con las estadísticas el 30% de los empleados se van durante estos primeros meses.
Pasando este periodo, es más probable que los empleados que queden perduren por más de dos años en la empresa.
En primera instancia, cuando dejamos de recibir respuestas de una persona y no volvemos a verla, nos preocupamos por su seguridad, salud y bienestar. Sin embargo, como dice el dicho “las malas noticias siempre son las primeras en llegar”, y al no recibir ninguna información sobre el empleado y encontrarse con la desagradable situación de que nos bloqueó o no quiere contestar, podemos dar por hecho que nos ghosteó.
El resultado de esta situación puede ser muy grave: retrasos de entregas con clientes, tener que llenar una vacante rápidamente, tener que volver a hacer ajustes en el sistema de nómina para dar de baja al empleado y pagarle únicamente por los días laborados, o no emitir ningún pago en caso de que no se haya presentado en absoluto.
Aunque parezca un concepto nuevo, el ghosting laboral no lo es. Es un problema que ya era común, pero que se exacerbó durante y después de la pandemia especialmente por la popularización de los anuncios en línea y los trabajos a distancia.
Algunas de las causas del ghosting son:
Lamentablemente, los anuncios en los que se ofrece un puesto maravilloso, con funciones específicas y con el salario real publicado son muy pocos… lo común es encontrar anuncios poco claros, en los que se omiten las responsabilidades clave del puesto. Incluso hay algunos donde se indica un sueldo, pero en realidad es un puesto en el que se gana por comisión.
Al explicar los detalles del puesto de trabajo, es muy probable que el candidato se espante y desaparezca de la empresa sin dejar rastro… y si bien no justificamos esta acción, es comprensible que el empleado opte por no aceptar esta oferta.
Antes de entrar a trabajar, un candidato puede revisar comentarios y reseñas de otros empleados para conocer más sobre la empresa donde va a trabajar… y si encuentra cosas negativas, probablemente salga huyendo.
Esto mismo vale sin el candidato escucha malos comentarios de los empleados que actualmente trabajan en la empresa, o si percibe un mal clima laboral.
El onboarding consiste en acelerar la incorporación de un nuevo colaborador a la empresa para que se adapte a la cultura empresarial y comprenda cuáles son sus funciones para que pueda llevarlas a cabo de forma adecuada. De no hacerlo, el nuevo empleado no solo se sentirá confundido y sin rumbo, sino que puede percibir que no es valorado por sus empleadores.
Las empresas deben considerar que los nuevos talentos no solo buscan una buena remuneración económica: la misión, la cultura empresarial, la satisfacción laboral y las relaciones interpersonales positivas son clave para atraer y retener a los talentos.
Si no cuentas con un departamento de recursos humanos, recurrir a una empresa especializada es una excelente opción. En Nomitek, además de ser una empresa de nóminas, ofrecemos consultoría en recursos humanos para el manejo de nóminas complejas. Nosotros nos encargamos del proceso de selección y tú solo eliges a los mejores candidatos.
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